Han pasado ya 12 días de juicio contra Carmen Merino, la conocida “decapitadora de Castro Urdiales”. El jurado ha probado que esta mujer causó la muerte de su pareja y la fiscalía ha reclamado quince años de prisión, atribuyendo al homicidio agravante por parentesco y el suceso a un móvil económico.
Inicialmente, la acusación solicitaba prisión permanente revisable, por todos los hechos cometidos por la Carmen, pero se ha adherido a la petición del fiscal.
Otro detonante a la acusación de Carmen Merino fue la búsqueda que hizo en internet de como cometer este horrible suceso y la compra de productos de limpieza.
El veredicto fue emitido por el jurado que estaba compuesto por 9 miembros, de los cuales 8 consideraron culpable como autora de la muerte de Jesús Mari Baranda, su pareja.
El abogado defensor solicitó que se aplicara la pena mínima a los cargos, que son 12 años y medio. Con este argumento intentó exculpar a la procesada: “... que Carmen Merino hubiese decapitado a su marido ya muerto e introducido la cabeza en una bolsa y entregado a la vecina, eso no es prueba de que matara a su marido”, argumentando así que, lo único que prueban estos hechos son un encubrimiento de un crimen.
La letrada de la acusación y el fiscal señalan “esta señora es culpable de los hechos”, “acabó con la vida del señor Baranda y luego descuartizó el cuerpo”, ha sido hecho el crimen, con una premeditación total y absoluta.
Otra de las búsquedas que realizó la acusada es que tipo de pensión la quedaría si su marido fallecía, también una motosierra o cuanto tarda en descomponerse un cuerpo.