El sexting es el acto de enviar mensajes de texto o imágenes de contenido sexual a otra persona. Estos mensajes pueden ser enviados a través de mensajería instantánea, redes sociales o aplicaciones de mensajería móvil. A menudo, el sexting es considerado un comportamiento inapropiado o peligroso, especialmente cuando involucra a menores de edad o si las imágenes o mensajes son difundidos sin el consentimiento de la persona que los envió. El sexting puede tener consecuencias legales graves, especialmente si se considera la difusión de materiales sexualmente explícitos de menores. También puede ser una forma de acoso o abuso sexual. Es importante tener en cuenta que el sexting puede tener consecuencias a largo plazo y es importante ser cuidadoso al enviar mensajes de este tipo.
El grooming es la parte más atroz de esta práctica que consisten en una forma de abuso sexual que consiste en la preparación y seducción de una víctima para abusar de ella. A menudo, el grooming implica la creación de una relación de confianza con la víctima y su familia, y puede incluir el uso de regalos, atención y afecto para ganarse la confianza de la víctima y de su entorno. A veces, el grooming también incluye la manipulación emocional y la explotación financiera de la víctima. Es importante tener en cuenta que el grooming puede ser realizado tanto por extraños como por personas conocidas por la víctima, como amigos, miembros de la familia o incluso profesionales que trabajan con niños.